En este Blog, Isabel Melo, miembro de la comunidad SciArt LATAM, relata su experiencia personal en la visualización científica cinemática o SciVis, que consiste en presentar datos científicos reales de una manera comprensible y estéticamente llamativa para el público. Ha desarrollado algunas representaciones de los procesos que ocurren en la unidad fundamental de todo organismo vivo, compatibilizando el arte y su investigación en biología celular.
La ciencia no es para todos; como en toda especialidad, la jerga científica, los métodos y gráficos parecen crípticos para una persona externa. No es para menos, pues los científicos y expertos logran una lectura del universo que requiere estrategias tan complejas como los procesos que estudian. Sus resultados intraducibles, a primera vista, para los espectadores del común; son parte de una historia mucho mas larga empapada de tecnicismos y minucias, absolutamente necesarios para construir conocimiento fidedigno. Así que no es para todos; pero precisamente por su alcance y significancia, debería serlo. La ciencia requiere que espectadores, aficionados y hasta opositores, encuentren fácil acceso a ella.
Desde hace un tiempo la visualización científica cinemática (o SciVis) llamó mi atención como investigadora y como artista. Consiste en presentar datos científicos reales de una manera comprensible y estéticamente llamativa para el público en general. Los datos son transformados en representaciones visuales al crear modelos 2D o 3D, determinar mapas de color, animar o simular eventos, entre otros. Todo ello se usa para construir una historia que eduque e informe a través de metáforas visuales.
Los datos comprobados que son visualizados de una manera familiar, se presentan como más confiables y memorables para las personas. En 2006, la película documental “Una verdad incómoda”, que denunciaba la realidad del calentamiento global, logró generar uno de los movimientos ecologistas mas grandes de la historia; a pesar de que la denuncia sobre el desastre ambiental existía desde los años 80. ¿Qué hizo la diferencia? El filme mostraba imágenes devastadoras, recopilaba datos inéditos, y exponía gráficos alarmantes y claros.
Recordando la frase de Mark Walport “La ciencia no logra su cometido hasta que se comunica”. En esta era de desinformación y fake news, la ciencia debe ser para todos. ¿Qué es un virus?, ¿Qué podemos hacer para detener el calentamiento global?, ¿El universo es infinito?; son discusiones que deberían hacer parte del llamado conocimiento general, a través de herramientas visuales claras.
Aunque lejos de alcanzar el contenido visual que tanto admiro, como investigadora en biología celular he desarrollado algunas representaciones de los procesos que ocurren en la unidad fundamental de todo organismo vivo. Programas como Blender, Photoshop y After Effects han sido extremamente útiles para capturar la información en una sola unidad de contenido visual. No sólo ha enriquecido algunos artículos publicados o presentaciones; también ha capturado la atención de personas externas a mi área.
Aún hay mucho por explorar en el arte de desarrollar recorridos de información visualmente extáticos para darle a la ciencia un lugar entre las masas; para que sea comprendida, apoyada y promovida. La SciVis puede acabar con esa especie de oscurantismo fortuito que relega la ciencia a unos pocos intelectuales. Crear buenas producciones visuales de background científico puede ser un catalizador para transmitir resultados de investigación complejos y atraer a nuevas audiencias. Con certeza, podemos esperar en el panorama futuro una ciencia gráfica, impresionante y con una voz amplificada como nunca la ha habido antes.
TW:@ismbel_
IG: @ismbel
Fuentes consultadas:
“Cinematic Scientific Visualization: The Art of Communicating Science” © 2019 California Academy of Sciences, NASA Scientific Visualization Studio, National Center for Supercomputing Applications, University of Illinois at Urbana-Champaign